Teano de Crotona

Biografía

Nacida en Crotona, ciudad del sur de Italia de la que toma el apellido, en el siglo VI a.C., específicamente en el 546 a.C., fue hija de Brontino de Metaponto, quien pertenecía al grupo religioso de los órficos y a la escuela pitagórica, es más, Brontino fue un amigo de Pitágoras. Debido a esto y a que Pitágoras no veía el ser mujer como elemento descalificante para estudiar, Teano fue aceptada dentro de la escuela y destacó por su intelecto desde el primer momento.

A los pocos años de ingresar, Teano se convirtió en profesora de la propia escuela y contrajo matrimonio con su director, Pitágoras. Al respecto de cuántos hijos tuvieron hay discrepancias, algunos historiadores afirman que tuvieron una hija, Damo, y un hijo, Telauges, y otros que dicen que tuvieron tres hijas, Damo, Myia y Arignote, y dos hijos.

Se dice que Cilón, un ciudadano noble de Crotona, líder por nacimiento, rico y poderoso, pero también violento y tiránico, deseaba ansiosamente participar del modo de vida de los pitagóricos. Se acercó a Pitágoras, para entonces un hombre mayor, pero fue rechazado en virtud de los defectos de carácter antes mencionados. Cilón decidió tomar venganza y juró perseguir a los pitagóricos hasta el último hombre. Pero Jámblico, filósofo neoplatónico del siglo III y nacido en la actual Siria, la discute, arguyendo que el ataque de Cilón fue un asunto menor y que Pitágoras regresó a Crotona.

La versión mayormente aceptada es la primera y sobre ella se cuenta que Teano, tras la destrucción de la escuela y la muerte de su marido, logró escapar y llevarse consigo importantísimos escritos gracias a la ayuda de Damo. Tras esto, se dedicó a expandir los conocimientos de los pitagóricos por Grecia y Egipto.

Aportaciones

Debido a que todas las obras eran firmadas por Pitágoras, es difícil asegurar qué obra es de quién, sin embargo, a Teano se le atribuyen: una biografía de Pitágoras, un teorema sobre la proporción áurea, aportaciones varias a la teoría de números, a la teoría de poliedros regulares, a la Cosmología, al origen del Universo, a la Física, a la Medicina, a la Psicología Infantil y un tratado “Sobre la Piedad”.

«He oído decir que los griegos pensaban que Pitágoras había dicho que todo había sido engendrado por el Número. Pero esta afirmación nos perturba: ¿cómo nos podemos imaginar cosas que no existen y que pueden engendrar? Él dijo no que todas las cosas nacían del número, sino que todo estaba formado de acuerdo con el Número, ya que en el número reside el orden esencial, y las mismas cosas pueden ser nombradas primeras, segundas, y así sucesivamente, sólo cuando participan de este orden.» —Teano de Crotona, Fragmento del tratado "Sobre la Piedad".

Es en el tratado “Sobre la Piedad” donde expone la obligación que tienen hombres y mujeres de mantener y traspasar a sus hijos la necesidad de preservar el orden, la justicia y la armonía. Hacía también una diferenciación en cómo debía de cumplirse esta obligación según el sexo: los varones debían hacerlo “externamente”, en la sociedad, y las mujeres “internamente”, en el ámbito familiar. Añadía que, si bien ambos son sumamente importantes en los dos ámbitos, si la mujer falla, la sociedad entera se resiente ya que es la principal educadora, y quien transmite los principales valores.

Teano era una férrea defensora del orden y de la armonía no sólo en las matemáticas, sino en todas las cuestiones de la vida. Fue una mujer defensora del orden establecido y por ello defiende la necesidad de mantener la tradición. Para Teano el matrimonio era la forma más sublime de las relaciones entre sexos y el papel de la mujer era el de la vida privada, haciéndose cargo de la casa y los hijos y no aspirando para nada a la vida pública.

Según Ethel W. McLemore, el trabajo más importante de Teano es el de la proporción áurea. La proporción áurea, por aquel entonces, se desconocía por completo, así como los números irracionales, y el hecho de que lo descubriera proporcionó una nueva regla estética que traspasó fronteras y perdura a día de hoy, para muchos diseñadores y artistas, como un elemento clave dentro del proceso artístico.

La proporción áurea es una relación matemática entre dos elementos que da como resultado el número de oro (ɸ=1’61803…). Un ejemplo de esto es el rectángulo áureo, un paralelogramo cuyos lados están en proporción al número de oro (p.ej.: 13:8; 21:13).

Precisamente porque en toda la Antigüedad se conoció al número de oro no como unidad, sino como una relación, las teorías apuntan a que Teano lo halló de observar y descifrar cuál era la relación de proporcionalidad a la que diversos elementos de la naturaleza crecen, se desarrollan o toman forma. No sería hasta Euclides que se hallaría la fórmula a esta relación y se le consideraría número, aunque normalmente se le atribuya a Fibonacci.

La razón de su simbología, la letra phi, se debe a que Fidias utilizó la proporción en sus obras, la más destacable de ellas, el Partenón (de la cual se concibe que fue supervisor artístico), y el matemático americano Mark Barr utilizó en su honor la inicial de su nombre para denominar al número de oro.

Aparte de todo lo anteriormente mencionado, también se le atribuye un texto conjunto con sus hijas sobre la castidad visto desde el punto de vista de la comunidad pitagórica y bajo los virtudes pitagóricas de la templanza, la justicia, la fortaleza y la prudencia, dándole un enfoque de recogimiento grupal para un óptimo desarrollo de la meditación y la reflexión.

O, en otras palabras, un tratado de una primigenia vida de convento muy similar a la que conocemos en el mundo cristiano.